jueves, 10 de diciembre de 2009

Orgullo

Siempre quiero ocultar el sufrimiento, pero en esa convicción de orgullo impido que el dolor aparezca en mi vida, lo siento una y otra vez constantemente, como una experiencia que se repite una y otra vez.
Como un reproche que me hago a mi misma por existir, asimismo, cansada del dolor ya no siento nada más, vuelvo a querer las cosas de las que me había enamorado, de las que había odiado, trato de pensar como si mi vida pudiese ser transportada a un lugar encantado, algún lugar donde la gente haya olvidado su haber y es todo para mi.
Lo encuentro me relajo, trato de tenderme, como cuando niña hamacándome sobre una mecedora, esperando que caiga el sol por entre las montañas, dormir hasta que mis penas sean calmadas, olvidadas......
No soy más una niña porque regreso a mis rencores, a mis daños causados, a la gota, gota..... que fue puliendo mi alma, es ahí donde pongo la alerta: contemplo mi figura alta, flaca, cuya cabeza todavía permanece erguida dispuesta a alcanzar una meta, dando la esencia a mi verdadero ser, al eterno y salvaje odio que alberga mi mente, al dominio de los que me llevaron a la soledad, al anhelo de encontrar un igual que comparta el éxito, el amor, la paz....pensándolo bien: uno se complace con su propio brillo, porque precisamos de los demás?

Campeones del CRLM



Un poco de mi 2º novela

La desconfianza y la indiferencia por como se movía el mundo, le importaba un carajo, porque no podía concebir porque los seres humanos llegaban a semejantes estados, casas de chapas, vida de chapa, ¿quienes alimentaban sus deseos de vivir así? Sabia que el ser humano había logrado mucho y se ha equivocado a menudo, siempre dispuesto a ser humilde ante la naturaleza, buscando la verdad con lo que hay en los corazones, con lo que se ha concedido a la especie humana.

Su único deseo en ese momento era volver a casa, llegar a pensar en cambiar una puesta de sol por un amanecer con un hombre que la contuviera, pero por el momento ella sabia que se burlarían de sus deseos, pensando en una posible amargura, se alejaba de esa linda sensación de dormir acurrucada en los brazos de un hombre. Observó en una pausa de sus movimientos, la carraspera de los árboles, el inanimado silencio de las últimas horas del día.

Se preguntaba a si misma, que: si se puede vivir por la propia felicidad, de repente con la mente fija en la parada de un semáforo quedo maravillada ante la belleza de una repentina visión, un hombre apresurado se dirigía hacia otro semáforo donde su mujer con su hijo en los brazos lo esperaba, se acerco la beso en la frente, abrió el envoltorio de mantas entre los brazos de su madre para dar amor a su criatura, advirtió que: en las cosas cotidianas estaba la felicidad.

No sabia que albergaban esas almas clandestinas en medio de la ciudad, pero luchaban por mantener esos actos simples, se mantenían con vida, con estimulo, por medio de los instintos, emociones, estaban dispuestos a arriar bandera, a resistir el trabajo más duro por una nueva ganancia, cavar la tierra con los dedos de ser posible. Era un socorro que se prestaban con ganas y alegría para sentir eso, que: parece felicidad.

Cuerpo y mente

Porque el cuerpo y mente forman parte de "uno"?
Ese "uno" condenándonos por todos nuestros rehenes de amor, los métodos, los valores, nuestro honor, la profundidad de nuestros sentimientos.
Sentir el castigo por lo que llamamos virtudes, esas emociones que llevan a nuestro cuerpo para ser un instrumento de chantaje para los demás.
Extorsionados por el deseo de vivir, sacrificamos otras vidas, dejando de sentir amor por el temor, la desconfianza a la traición, esperando la única recompensa a nuestros logros para evitar el dolor .....esperando encontrar la capacidad de vivir.....
Vamos en busca de lo que podemos, no siempre de lo que queremos, nos toca ese rumbo, no lo elegimos, es así, maldecimos lo mejor de lo que somos: ese cuerpo y mente...fortaleciendo nuestro espíritu como un par de cuchillos para el sacrificio.
Pretendemos sobrevir a todas las tormentas sin sentirnos responsables de ellas, pero es así, no nos detenemos, no nos importa lo difícil que se ponga, intentamos dejar este mundo aunque: "uno"sea el ultimo que apague la luz.