miércoles, 12 de mayo de 2010

Mirando al piso


Juega arriba de mis borceguíes, no para orinar sobre la alfombra, le encantan los brazos, va con cualquiera que lo mime, no encuentro un método inmediato para que aprenda a cumplir sus necesidades, poco a poco ira aprendiendo, por suerte duerme como un lirón durante toda la noche, no extraña a su mami.

La soledad, los cigarrillos quedaron en el olvido como en un camino en el sentido de lo posible, para vivirlo en la posibilidad de ser vivido, es el momento, no hay compromisos con el mundo externo, estamos los dos en el afán de emanciparnos, de querenos....de compartir el diarío.