miércoles, 5 de agosto de 2009

Un lagrimón de tanto reir


Eramos como payasos sin fronteras, nos reíamos de nosotros mismos con la ayuda de un experto en sonrisas que nos liberaba de nuestras estructuras.

Liberamos endorfinas hasta dejar caer un lagrimón de tanto reir, el estrés de nuestras vidas, hasta volver a tocar tierra... fué un buen regreso, tirados en el muelle seguimos con ese interno contento que nos da felicidad a la luz de la luna.....una buena noche....